GUATEMALA. Esta es la historia de Henry López, el goleador que metió a Guatemala en el mapamundi del fútbol. Hace una década el “Torito” marcó el gol con el que la Bicolor clasificó al Mundial de Colombia 2011.
El 8 de agosto de 1992, mientras el país era gobernado por Jorge Serrano Elías, nació en la Ciudad de Guatemala Henry David López Guerra, el primer hijo del matrimonio integrado por Henry López y Zonia Guerra.
Aquel año de 1992 no es recordado necesariamente por algún éxito futbolístico para el país, ese año y unas semanas antes de que naciera Henry, la Bicolor se despidió tempraneramente de las clasificatorias al Mundial de Estados Unidos 1994, tras caer en la serie ante Honduras (0-0 y 2-0).
Pero el patojo trajo consigo un ángel. Se le vio desde que creció en la zona 18, en donde dio sus primeras patadas y corrió tras un balón. Otras veces la pelota lo buscó a él, principalmente en la zona de gol.
Sin un gran físico, pero si dotado de sangre fría, esa que tienen los goleadores de raza, hizo del área su habitad. Así llegó a las fuerzas básicas de Municipal en donde continuó depurando su exquisitez técnica para hacer goles.
Hasta que su familia y él debieron buscar nuevos horizontes, ante la desfachatez de unos sinvergüenzas extorsionistas, que los obligaron a radicarse en los Estados Unidos. Eso sí, jamás lo alejaron de la redonda. Es más, despertaron en él un nuevo instinto: el de viajar por el mundo mostrando sus cualidades futbolísticas.
Exportó sus goles a Estados Unidos, Puerto Rico, Brasil y hasta había fichado por el Tigres de México. Siempre con las maletas en la puerta y dispuesta a tomar un avión para emprender cualquier desafío, Henry se hizo grande.
La vida y el fútbol hicieron que volviera al país para jugar en la Selección Sub-20, con la que se llenó la garganta con el gol, con el tanto que más alegría nos ha dado en los últimos años a los guatemaltecos.
Habrá más de alguno que dirá que ha habido goles más importantes, pero el de López sencillamente nos metió en el mapa futbolero del mundo.
El 6 de abril de 2011, Henry tumbó al gigante de los mundiales juveniles de la Concacaf. Bajó a los Estados Unidos del avión que los llevaría a la Copa del Mundo de la FIFA Colombia 2011.
Los aniquiló con un derechazo, con el que marcó el gol de la ansiada clasificación. Fue el 2-1 en una noche en la que pocos creían en el milagro, que Henry hizo realidad en el ya legendario estadio Doroteo Guamuch Flores.
Podrán venir más mundiales, ojalá que así sea. Sin embargo, el primero siempre lo recordaremos. Y Henry López marcó la historia que hoy escribimos.
Hoy con 28 años es un futbolista retirado, quizá porque el futbol profesional a veces es bastante mal agradecido, quizá por esas cosas de la vida.
FOTO: Guatefutbol.com
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Bueno por H. López me acuerdo de ese gran dia. Un dia INOLVIDABLE y que mas tarde los grandes e incapaces corruptos gobernantes de la Federación Nacional en aquel tiempo no hicieron nada por hacer mejor esa selección Dorada del 2011
Que si les hubieran dado seguimiento aver a donde llevaban y también la culpabilidad de los equipos de la Liga Nacional que no les apoyo.
Hoy en dia muchas felicitaciones a este goleador y a todos los demas jugadores de esta generación que fueron al Mundial.
y donde esta?
Mucho talento se perdio despues de ese mundial. Porque habien un medio campista buenisimo pero lo perdieron. Ahora ojala se den cuenta quien en realidad tiene la culpa de lo que esta pasando a nuestro futbol.
quien en realidad tienen la culpa son los mismos jugadores, pensaron que con participar en un mundial sub 20 ya habian tocado el cielo, y se volvieron intratables, agrandados y pidiendo sueldos de cracks, ese es el gran problema de los chapines y no solo de los jugadores de la mayoria de personas, nos creemos la mama de tarzan y ni siquiera llegamos a ser la mica de el, y luego se le quiere echar la culpa a los directivos de los equipos, y cuando se les da oportunidad a los jovenes simplemente no dan la talla somos malos no exijamos mucho, popr eso los que invierten prefieren traer extranjeros de medio pelo que son mas baratos que los disque jovenes malos chapines y al final ellos con su dinero pueden hacer lo que les de la gana
Gracias Henry Lopez por esa alegría en ese 2,011!! Y que lindo estaba ese uniforme también con los números dorados!! Para una noche dorada!!
Una decada de trabajo perdida en el futbol nacional, al no darle seguimiento a esa generacion dorada, la mayoria de esos jovenes estan retirados, algunos ya son profesionales universitarios, otros se perdieron en el olvido ingrato, asi paga nuestro futbol a los jovenes chapines. Aqui se les da mas prioridad a los extranjeros que a los criollos, cuando reza un dicho que la generosidad debe empezar por los de la propia casa, pero aqui las cosas se hacen al reves en el pais de chapinlandia.
Cuando veremos esto de nuevo nunca desperdiciaron una selección de oro los corruptos siempre quitándole el sueño de un mejor país a Guatemala.