En la asamblea de la Liga Nacional no hubo sorpresas y todo seguirá igual, con la sola excepción de que ahora ya no serán cuatro las amonestaciones para que un jugador sea suspendido, sino que serán cinco.
El sistema de competencia no tuvo ninguna modificación, por lo que seguirán clasificando seis, aunque eso sea sinónimo de premiar con la posibilidad de pelear por el título o al menos una taquilla importante a conjuntos que terminaron en una mediocre posición de media tabla.
La saturación de partidos continuará, con el agregado de que habrá torneo de copa, lo que hará que las semanas “largas” serán muy pocas y no me cabe ninguna duda de que la mayoría de ellas serán aprovechadas para sesiones dobles o quizá triples de entrenamientos en el seno de la selección, lo que desgastará aún más en lo físico a los jugadores, los que estarán metidos de cabeza en el aprendizaje del Tiki-Taka, aunque en algún juego clave terminen jugando al pelotazo, como sucedió en la última final.
De los foráneos, ni hablar: seguirán siendo cuatro extranjeros no elegibles, sin limite de nacionalizados y tampoco habrá limite para los paquetes y aquellos que no dejan nada al futbol guatemalteco.
Este artículo también fue publicado en la sección de Deportes de Nuestro Diario el jueves 21 de junio.