Lausana, Suiza, 7 Ago 2020 (AFP) – El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, objeto de un proceso penal en Suiza, aseguró que no tiene «nada que ocultar» en una carta enviada a las federaciones, donde lamenta el «considerable daño» causado al organismo y a él mismo.
En esta carta enviada el jueves a las 211 federaciones y obtenida este viernes por la AFP, Infantino desea explicar la situación «de manera clara y precisa, debido al eco mediático que ha levantado esta decisión».
El sucesor de Sepp Blatter es desde el 30 de julio objeto de un proceso penal en Suiza, puesto que el fiscal federal extraordinario considera que hay «elementos constitutivos de un comportamiento punible en relación a la reunión entre el fiscal general Michael Lauber, el presidente de la FIFA y el primer fiscal de Haut-Valois», Rinaldo Arnold, amigo de la infancia de Infantino.
Las infracciones en cuestión son «abuso de autoridad», «violación del secreto de función» y «obstaculización de la acción penal».
Estos encuentros, de los que no existe ningún rastro escrito «no eran en ningún caso secretos y ciertamente tampoco ilegales», repitió Infantino, lamentando que los recientes acontecimientos hayan «causado un daño considerable a la FIFA y a mí mismo (…). Estas denuncias anónimas no tienen el menor fundamento».
«De hecho, no hay ningún elemento tangible ni base factual que respalde este proceso penal, que se abrió sin que ni la FIFA ni yo mismo fuéramos consultados previamente para dar explicaciones», explicó, asegurando que no tenía «nada que ocultar».
Este proceso podría justificar la apertura de una investigación por la Comisión de Ética de la FIFA, que también tiene el poder de suspender provisionalmente al presidente, como ya hizo en 2015 con Blatter.
Desde el anuncio de la apertura del proceso, y aparte de «la carta de anuncio», Infantino no ha recibido «ninguna información» por parte del fiscal Stefan Keller y «no ha sido convocado» para una audiencia, dijo David Zollinger, uno de los abogados del presidente de la FIFA, consultado por la AFP.
«Pero supongo que será bastante rápido», añadió.
Ex fiscal, Zollinger fue miembro de la Autoridad de Vigilancia de la Fiscalía de la Confederación (AS-MPC) de 2011 a 2016, un organismo que supervisó al fiscal Lauber, culpado junto a Infantino.
«La cuestión de un eventual conflicto de intereses puede justificarse en relación a mi pasado judicial pero no, no hay ningún conflicto de intereses», señaló Zollinger. «Mis últimas reuniones en la AS-MPC se remontan a junio-julio de 2016 y en ese momento nadie conocía estos encuentros» entre Lauber e Infantino, añadió.