El Barcelona empezó la Liga de forma inmejorable, goleando al Villarreal en el Camp Nou.
Los azulgrana brillaron gracias a la actuación colectiva, pero también a la individualidad de Ansu Fati quien contagió a Lionel Messi.
Ansu Fati abrió la ruta de la goleada al 15 y volvió a repetir la dosis al 19, para darle comodidad al juego a los azulgrana que ganaban 2-0.
Por si algo le hacía falta al juvenil de Barsa, provocó una falta penal, que fue cobrada y convertida en gol por Lionel Messi a los 35 minutos.
Pau Torres al 45 anoto en propia portería para el 4-0 definitivo.
Los de Ronald Koeman comenzaron bien y dejan un buen sabor de boca, pero aún la temporada es larga y complicada.
Foto: FC Barcelona
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