Esta medida es consecuencia de la prohibición de reuniones de más de 1.000 personas en la región de Baviera, decretada el martes, para luchar contra la propagación de la epidemia del nuevo coronavirus.
«La prioridad número uno es la salud», aseguró el secretario general de la DFB, Friedrich Curtius.
«Estamos en contacto permanente con las autoridades competentes y tenemos confianza en sus decisiones aunque es naturalmente doloroso ver este gran clásico del fútbol desarrollarse con las tribunas vacías», añadió.
Esta ventana internacional es una ocasión para los seleccionadores de hacer una revisión de efectivos antes de la difusión de sus listas de jugadores convocados para la Eurocopa.
En la misma semana, la Mannschaft tiene que jugar en España (26 de marzo) y los Azzurri en Inglaterra (27 de marzo).