FIFA ordenó al Comité Ejecutivo de la Fedefut que debía renunciar a más tardar el miércoles 24 a las seis de la tarde, lo cual fue cumplido a medias, pero para normalizar nuestro futbol esto es insuficiente.
La Federación Internacional indicó varias veces que no reconocía a Jorge Mario Véliz y a los demás directivos, por lo que era obvio que no iba a compartir con ellos un solo momento y les puso plazo para salir de la Federación previo a que venga una comisión conjunta de FIFA y Concacaf a evaluar la situación, nombrar un nuevo comité de regularización y posteriormente llamar a elecciones bajo los nuevos estatutos para conformar los órganos de dirección y habilitar de nuevo a Guatemala en el plano internacional.
Hasta allí todo bien, pero esperamos que esta orden tajante vaya acompañada de la expulsión del futbol de los 34 títeres, su patrón y todos aquellos que desafiaron a FIFA, porque si no al poco tiempo estarán de regreso.
Llegar a este punto no ha sido fácil, pero deshacernos de estas lacras es un triunfo que ojalá se aproveche para desterrar a los directivos corruptos e ineptos, sustituyéndolos por personas probas y capaces, lo cual es indispensable para sentar las bases para el desarrollo del futbol.
Este artículo también fue publicado en la sección de Deportes de Nuestro Diario el miércoles 24 de abril.