Berlín, 8 Jun 2020 (AFP) – Por primera vez en la historia del torneo, un club de la cuarta categoría del fútbol alemán, el FC Sarrebruck, jugará este martes una de las semifinales de la Copa de Alemania contra el potente Bayer Leverkusen… ¡94 días después de su último partido de competición!
La otra semifinal opondrá el miércoles al vigente campeón copero, el Bayern Múnich, contra el Eintracht Fráncfort.
¡Cómo los profesionales! El plantel del modesto Sarrebruck ha tenido que aislarse en un hotel durante siete días para prevenir todo riesgo de contagio del COVID-19 y, al igual que los partidos de la Bundesliga, el encuentro se disputará a puerta cerrada en esta ciudad muy cercana a la frontera con Francia.
Un hándicap para este modesto equipo que debe al apoyo de su público gran parte de su éxito en esta copa, en la que eliminaron a dos equipos de la Bundesliga (3-2 al Colonia en dieciseisavos y en los penales al Fortuna Düsseldorf en cuartos).
«¡Seguimos sin creérnoslo! Cuando miramos nuestro recorrido nos frotamos los ojos», admite el centrocampista Tobias Jänicke a la agencia deportiva SID, filial de la AFP.
«Es algo que recordaremos toda la vida. Estas sensaciones y estos recuerdos los guardaremos para siempre», añade.
– «Ganar al miedo» –
Las condiciones en las que llega al partido el Sarrebruck no pueden ser peores y no sólo por la ausencia de su público: su campeonato regional se suspendió en marzo y no se reanudará; no juega desde entonces, ni siquiera amistosos; reanudó sus entrenamientos a mediados de mayo, cuando su rival, el Bayer Leverkusen, ya había vuelto a la Bundesliga, en la que lucha por meterse en la próxima ‘Champions’ (es actualmente quinto).
«El Bayer Leverkusen es de mayor nivel que nuestro precedentes rivales», admite el técnico, Lukas Kwasniok.
«Pero nuestro principal adversario no es el Bayer Leverkusen, sino el miedo. Si logramos sacárnoslo de encima, creo que podemos dar otra sorpresa», explicó.
Alcanzar la final del 4 de julio en Berlín sería el mayor logro de este club que fue miembro fundador de la Bundesliga en 1963 y que desde entonces pasó por las tres primeras categorías del fútbol alemán, sin estar nunca más de dos años en la élite, y que en 2014 cayó a la cuarta división, que abandonará la próxima temporada tras haber logrado el ascenso, gracias en parte a la cancelación de su liga por el coronavirus.
El Sarrebruck, que ha sido tres veces semifinalista copero (1957 y 1958, antes del profesionalismo, y en 1985, cuando jugaba en segunda) podría eventualmente encontrarse en la final al club más laureado del país, el Bayern Múnich, que con la Bundesliga casi en el bolsillo, parece en condiciones de lograr un nuevo doblete.
El equipo que entrena Hansi Flick ha vuelto a al actividad en plena forma, ganando sus cinco partidos jugados, lo que le ha permitido aumentar su diferencia con respecto a su principal perseguidor, el Borussia Dortmund, a siete puntos (con sólo 12 en juego).
Una de sus víctimas en esta reanudación fue su rival en la copa, el Eintracht Fráncfort, al que derrotó por 5-2 el pasado 23 de mayo.
No obstante, el Bayern, que busca su vigésimo título copero, no deberá fiarse de un rival que ya tiene la permanencia prácticamente asegurada y cuyo último título fue la Copa, que ganó hace dos temporadas, al derrotar en la final al equipo bávaro (3-1).
— Programa de las semifinales de la Copa de Alemania (en horas GMT):
– Martes 9 de junio
(18h45) Sarrebruck (4ª) – Bayer Leverkusen
– Miércoles 10 de junio
(18h45) Bayern Munich – Eintracht Fráncfort