No sé quién es el inventor del “sistema suizo” con el que se juegan ya varias competencias de Concacaf y que ahora también veremos en la Liga de Campeones de Europa (foto) y otros torneos.
El denominador común es darle más contenido a las televisoras para que estas paguen más por los derechos de transmisión, dinero que en buena parte se queda en los bolsillos de los dirigentes.
El tema es que ya no son suficientes los mundiales o los campeonatos de cada confederación, sino que ahora hay necesidad de muchas competencias para saciar la voracidad de quienes están al frente del futbol, siendo para ellos irrelevante que los jugadores tengan que cumplir calendarios de más de sesenta partidos en diez meses.
A todo ello se suma ahora el ya mencionado sistema suizo, que ya no enfrenta a los equipos a visita recíproca, sino jugando con la mitad de los adversarios de local y con la otra mitad de visita, lo que puede poner en desventaja a alguien si solo le toca ir a la casa del rival más fuerte, sin que este se exponga en el feudo del contrincante.
Por eso en los torneos hay cada vez más equipos y más partidos, muchos de ellos de bajísima calidad, siendo el dinero lo único que importa.
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Este artículo también fue publicado en la Sección de Deportes de Nuestro Diario el miércoles 18 de septiembre.
