Londres, 7 Ago 2020 (AFP) – Un partido de la 2ª jornada de la liga escocesa de fútbol, programado el sábado, tuvo que aplazarse luego de que dos jugadores del Aberdeen dieran positivo en COVID-19, anunció este viernes el equipo al que iban a enfrentarse, el St Johnstone.
Otros seis jugadores del Aberdeen fueron puestos en aislamiento durante dos semanas después de pasar una noche en un bar con los dos contagiados, pocas horas después de la derrota de su equipo 1-0 contra el Rangers, que suponía el inicio de la temporada 2020/2021 en Escocia.
La temporada anterior quedó interrumpida a mediados de marzo a ocho jornadas para el final.
El anuncio de los dos casos positivos asintomáticos provocó una fuerte reacción del Gobierno escocés, quien se declaró «decepcionado por los actos de estos individuos que han puesto en peligro el regreso del fútbol profesional en Escocia», según un portavoz.
«Fue una clara violación de las reglas impuestas por la SFA (Asociación Escocesa de Fútbol en sus siglas en inglés), la SPFL (Liga Escocesa de Fútbol Profesional) y por el Gobierno escocés», añadió.
La ciudad de Aberdeen es actualmente un importante foco de nuevos contagios y el miércoles se ordenó el cierre de pubs y bares, además de restricciones en los desplazamientos de sus 230.000 habitantes.
El ministro de Deportes, Joe Fitzpatrick, convocó a los rectores de los organismos del fútbol para hablar del caso de estos ocho jugadores.
«Como muestra la ola de contagios (en Aberdeen), es necesario que se respeten los protocolos estrictos al pie de la letra para permitir un regreso progresivo del deporte con completa seguridad», destacó el portavoz.
El presidente del Aberdeen, Dave Cormack, dijo que «habida cuenta de los esfuerzos de todos para proteger nuestros activos más preciados, es un golpe muy duro» y prometió que el club abriría una investigación detallada sobre este caso.