En la ida disputada en Londres, el resultado no reflejó la superioridad mostrada por los alemanes. Durante 70 minutos, los ‘Spurs’ corrieron detrás de la pelota, que no vieron hasta que el Leipzig levantó el pie del acelerador en el tramo final.
El club londinense, no obstante, es capaz de dar la sorpresa lejos de su estadio: finalista inesperado el año pasado, el Tottenham escribió las más bellas páginas de su aventura europea como visitante, con una victoria (1-0) en Dortmund en este mismo estado de la competición y, sobre todo, en la semifinal heroica en Ámsterdam, cuando remontó la eliminatoria con tres goles en los últimos 35 minutos, el decisivo en el 90+6 a cargo del brasileño Lucas Moura.
Pero aquella epopeya estuvo liderada desde el banquillo por el argentino Mauricio Pochettino, sustituido por Mourinho en noviembre.
Es cierto que el entrenador portugués cuenta con un palmarés impresionante, con dos ‘Champions’ ganadas con el Oporto (2004) y el Inter (2010), pero sus éxitos quedan ya lejos y su balance reciente no tiene nada de glorioso.
Los equipos dirigidos por el técnico portugués no han ganado ninguna de las últimas siete eliminatorias disputadas en Copa de Europa.
El pesimismo que rodea al club inglés dice mucho de la pérdida de prestigio de Mourinho, otrora considerado capaz de dar la vuelta a cualquier situación.
– Una defensa muy débil –
‘Mou’ pareció incluso dudar de su capacidad cuando dejó entrever que la directiva del club debería decidir qué partido privilegiar entre la jornada de la Premier League contra el Burnley el pasado sábado (1-1) y la vuelta contra el Leipzig del martes, ya que el equipo no estaba en condiciones de jugar al máximo dos encuentros seguidos.
Un discurso que se encuentra en las antípodas de la seguridad mostrada cuando llegó a Inglaterra en 2004, cuando reivindicó: «Soy campeón de Europa, no salgo de la nada. Soy el ‘Special One'».
Siempre reacio a la autocrítica, Mourinho parece pasar casi todo su tiempo en buscar excusas, a veces inadmisibles, o a señalar responsables, a imagen del francés Tanguy Ndombélé, señalado en público el pasado sábado por el técnico.
Sobre todo, Mourinho da la impresión de haber subestimado la gravedad de los problemas del Tottenham, con un plantel en final de ciclo y una fragilidad defensiva que no ha sabido resolver, pese a que la organización defensiva fue siempre el fuerte de los equipos entrenador por el luso.
«No mantenemos suficientemente nuestra portería a cero», deploró la semana pasada el defensor belga Jan Vertonghen. «No es de ahora, ni de la semana pasada. Es desde hace más de un año», admitió.
– Tomar riesgos –
El problema para los ‘Spurs’ es que en Leipzig deberán tomar riesgos si quieren voltear la eliminatoria.
Siempre hábil en sus analogías, el portugués comparó su dilema a la hora de encontrar el equilibrio con una manta demasiado pequeña: «Si la subes tienes frío en los pies y si te cubres los pies, dejas la mitad del cuerpo al aire libre».
Para el técnico del Leipzig, el joven Julian Nagelsmann (32 años), Mourinho sigue manteniendo su misticismo: «Yo he ganado un título y con un equipo juvenil. ¡Él ha ganado más de 20 como profesional», declaró este lunes en la previa del partido.
«Lo que cuenta no es que Nagelsmann elimine a Mourinho, sino que mi equipo elimine al Tottenham y se clasifique para los cuartos de final», añadió.
El Leipzig espera recuperar algo del aire que ha perdido en las últimas semanas en la Bundesliga, con cuatro empates en los últimos seis partidos, que le han distanciado del líder Bayern Múnich (5 puntos).
«Se trata de volver a ganar, primero contra el Tottenham», insistió el arquero internacional húngaro Peter Gulacsi: «Queremos hacer algo grande (…) pero vamos a necesitar aprovechar los espacios que se abran y marcar goles».
Si los ‘Spurs’ tienen las bajas en la delantera de Harry Kane y Son Heung-min, a la que se ha añadido la del holandés Steven Bergwijn, el Leipzig sufre la sequía de su goleador Timo Werner: después de haber marcado 20 goles en las primeras 18 jornadas, el internacional germano sólo suma un gol en sus últimos siete partidos de Bundesliga.
– Alineaciones posibles:
Leipzig: Gulacsi – Klostermann, Upamecano, Halstenberg – Mukiele, Laimer, Sabitzer, Angelino – Nkunku, Werner – Schick. DT: Julian Nagelsmann.
Tottenham: Lloris – Serge Aurier, Alderweireld, Davinson Sánchez, Davies (o Vertonghen) – Lo Celso, Fernandes (o Lamela), Winks – Dele Alli, Lucas. DT: José Mourinho (POR)
Árbitro: Carlos del Cerro Grande (ESP)