Será el regreso de los ‘Verts’ a la final de esta competición después de 38 años de su última presencia en la misma, cuando fue superado en la tanda de penales precisamente por el París Saint-Germain.
En el duelo de este jueves, el Rennes se adelantó con un penal transformado por el senegalés M’Baye Niang (33), el Saint-Etienne empató en el 43 por medio de Timothée Kolodziejczak y en el 90+4 Ryand Boudebouz dio la victoria definitiva a los locales.
El Saint-Etienne es tercero en el palmarés de títulos de la Copa de Francia, con seis títulos, pero el último de ellos se remonta a 1977. El PSG, por su parte, es el equipo que más veces ha conquistado ese torneo, con 12.
En la segunda semifinal, la jerarquía sirvió de poco. El Saint-Etienne se olvidó por una noche de sus penurias en la Ligue 1, donde es apenas decimosexto y está seriamente amenazado por el descenso de categoría, mientras que el Rennes, tercero de su liga, parecía favorito pero terminó regresando a Bretaña derrotado.
«La clasificación a la final es merecida. Estoy muy contento por mi plantel. Todo ha ido bien, con ese gol en el tiempo de descuento. En los últimos tiempos no habíamos tenido fortuna, perdimos sin merecerlo en algunos partidos. Este es el camino a seguir, supone un poco de oxígeno y tener la final en el punto de mira va a dar vida a nuestro grupo», celebró el técnico del Saint-Etienne, Claude Puel.
– Remontada con emoción –
El Rennes no podrá repetir su título de la pasada temporada, cuando levantó su tercera Copa de Francia al superar en la tanda de penales al París Saint-Germain.
«Encajar un gol en el último momento es un escenario cruel, pero admito que no hemos jugado el partido que habíamos imaginado», dijo por su part el técnico del Rennes Julien Stéphan.
En la primera parte, el Rennes se salvó de recibir el primer gol en el 18, cuando Damien Da Silva despejó cuando el balón iba directo hacia la línea de gol y los bretones pudieron luego ponerse por delante en el marcador por un penal cometido sobre el brasileño Raphinha y que M’Baye Niang transformó en el 33.
Poco antes del descanso, el Saint-Etienne equilibró de nuevo el duelo con un centro de Loïs Diony que Timothée Kolodziejczak remató de cabeza, de espaldas al arco, para poner el empate a uno en el 43.
En la segunda mitad la igualdad se mantuvo hasta casi el final y todo parecía apuntar a la prórroga, hasta que en el 90+4 Denis Bouanga cedió en corto para Boudebouz, que desde casi la frontal envió un tiro ajustado al palo, que desató la fiesta en el estadio Geoffroy Guichard.
El miércoles, el París Saint-Germain se había clasificado con un 5-1 en el campo del Lyon, con un triplete de Kylian Mbappé.