Londres, 15 Jun 2020 (AFP) – Tras haber reunido 20 millones de libras (25 millones de dólares) para financiar comidas para personas desfavorecidas, el delantero del Manchester United, Marcus Rashford, pidió este lunes al gobierno británico que continúe ayudando a los niños pobres a alimentarse este verano (boreal).
El gobierno británico había anunciado a principios de mes que un programa que permitía a las familias modestas recibir bonos de compras de alimentos por 15 libras (18,8 dólares) por niño y semana, instaurado cuando el confinamiento había forzado a las escuelas y a sus comedores a cerrar, no será prolongado durante las vacaciones escolares estivales.
En una carta abierta a los diputados la Cámara de los Comunes, Rashford les pide «echar marcha atrás (en esta decisión) y hacer de la protección de los más débiles la prioridad absoluta».
«Dejando cualquier pertenencia política de lado, ¿no nos podemos poner de acuerdo sobre el hecho de que ningún niño debe pasar hambre?», pidió.
En definitiva, se trata de poder «mirarse al espejo diciéndose que hemos hecho todo lo posible para proteger a aquellos que, sea cual sea la razón, no pueden protegerse por sí mismos», añadió el delantero de 22 años.
Un portavoz del primer ministro británico Boris Johnson aseguró que este último leería la carta.
Rashford «utilizó su fama de forma muy positiva para señalar problemas muy importantes. El primer ministro comprende las dificultades con las que se han encontrado las familias en todo el Reino Unido», afirmó.
– Recuerdos de infancia –
Desde el inicio del confinamiento, el internacional inglés se movilizó por esta causa, recordando que él también, perteneciente a una familia de 5 hijos con ingresos modestos, solo había podido a menudo alimentarse gracias a ayudas de su escuela.
«Lo que las familias deben afrontar en este momento, yo lo tuve que afrontar también cuando era más joven. Y es muy complicado salir de ello. Es verdaderamente importante para mí ayudar a las personas que sufren en este momento», explicó en su carta «que viene del corazón».
En los primeros días del confinamiento, había lanzado a través de las redes sociales y sobre todo en su cuenta Twitter, una campaña de recogida de fondos con la asociación FareShare, que lucha contra el derroche alimenticio y la malnutrición.
Una primera ola de donaciones había reunido 134.000 libras (167.900 dólares), en la que él había colaborado con su propio dinero hasta elevar la suma a 400.000 libras (501.000 dólares), en abril.
Después se comprometió a tratar de reunir 20 millones de libras (25 millones de dólares) en donaciones financieras y alimenticias para permitir que tres millones de comidas sean servidas a personas desfavorecidas, un objetivo alcanzado a finales de la semana pasada.