Todo parece indicar que la FIFA se ha dado cuenta que el VAR, tal y como funciona en la actualidad, no está ayudando al futbol, por lo que ha iniciado los estudios pertinentes para reformarlo.
La nueva normativa traería consigo la posibilidad de que sean los entrenadores de cada equipo quienes tengan la facultad de pedir que se revisen las jugadas que a su juicio fueron mal sancionadas, lo que obligaría al árbitro a ir al monitor, verlas y confirmar o variar su decisión. En ese escenario, los técnicos tendrían dos oportunidades por partido para retar un fallo del colegiado, pero no se tomarían en cuenta aquellas en las que se les concediera la razón.
El Presidente de la Comisión de Árbitros de la FIFA, el italiano Pierluigi Collina (foto), encabeza el grupo que trabaja haciendo las primeras pruebas con las enmiendas, las que veo bien en principio, aunque creo que lo adecuado sería que cuando un entrenador desafíe la decisión del árbitro, sea otro colegiado el que examine la jugada, como se hace en el Béisbol de Grandes Ligas, dado que puede darse el caso de que un árbitro mantenga su decisión aunque esté equivocado, algo que se puede evitar dejando el fallo definitivo en otras manos.
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Este artículo también fue publicado en la Sección de Deportes de Nuestro Diario el miércoles 20 de noviembre.