Las falencias que ha mostrado Brasil en la eliminatoria mundialista sudamericana se replicaron en su debut en la Copa América 2024.
Su primer rival fue Costa Rica y el favoritismo para los brasileños era más que obvio, pero el juego de conjunto brilló por su ausencia y las individualidades tampoco aparecieron, en gran medida por el planteamiento de los ticos, que privilegiaron mantener el bloque en defensa, saliendo poco para no caer en la trampa de atracción de los auriverdes que les hiciera dejar espacios en defensa.
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A pesar de ello el dominio de Brasil fue persistente, pero en el último cuarto de la cancha se juntaron los desaciertos de los sudamericanos y la eficacia de los ticos para defender hasta con las uñas, especialmente su guardameta Sequeira con grandes intervenciones, lo que hizo que en el primer período el marco centroamericano fuera horadado solamente una vez, pero la acción se invalidó por fuera de juego.
En el complemento Paquetá estremeció un poste al 62 y el guardameta Sequeira siguió siendo figura para evitar un autogol y volar de estupenda manera para salvar otro tiro de Paquetá. Todo lo demás fue un dominio estéril de Brasil, empecinado en hacer jugadas vistosas adentro del área contraria y rematando muy poco al marco, lo que favoreció a los costarricenses, que no tuvieron empacho en poner a sus once hombres adentro del área para mantener el empate.
Al final Brasil simplemente no pudo y Costa Rica celebró la igualdad sin goles, sobre todo porque lo consiguieron con un equipo muy joven ante uno de los grandes del futbol mundial.
Con el 0-0 entre brasileños y ticos, Colombia queda a la cabeza del Grupo D con tres puntos y Paraguay en el fondo sin unidades.
